Generación Z En El Mundial De Clubes: ¿Cómo Están Pachucha y Monterrey?
La Generación Z será una de las marcas distintivas del Mundial de Clubes 2025.
De los casi mil jugadores inscritos, el 68% nació entre 1997 y 2010; es decir, más de dos tercios del torneo estará representado por la generación más conectada y digital de la historia.
Después de la Generación Z, quienes más componen los planteles son los Millennials (1981-1996), que representan el 31,6% del total.
La Generación X está representada por un solo jugador: el arquero brasileño Fábio, de Fluminense, que con 44 años podría ser el único representante de su generación en el torneo.
La edad más común entre los inscritos es de 22 años, y el rango entre 21 y 24 concentra buena parte de los planteles.
La edad promedio general de la competición es de 26 años, lo que indica que el torneo se disputará en el punto justo de madurez física y técnica de la mayoría de sus protagonistas.
¿Cómo es la Generación Z Dentro Del Campo?
La fuerte presencia de la Generación Z no responde solo a una cuestión de recambio natural.
Estudios recientes revelan que esta generación destaca por su compromiso, regularidad y mentalidad de alto rendimiento.
Según el informe Gen XYZ de Ticket Sports, el 55% de los jóvenes entre 15 y 25 años considera al deporte como parte central de su estilo de vida.
Otro estudio, de Brain Inteligencia Estratégica, señala que el 46% practica actividad física con regularidad.
Fútbol, running y gimnasio lideran las preferencias, y hay un elemento común: la valorización del esfuerzo individual y la mejora constante.
Este perfil ayuda a explicar por qué tantos clubes en el mundo apuestan por esta generación.
Son futbolistas que crecieron inmersos en entornos digitales, con acceso a múltiples referencias internacionales, y con una gran capacidad de adaptación.
No solo están transformando el juego en sí, sino también las lógicas de formación y contratación.
Del Adolescente al Veterano: Los Extremos del Mundial
Siete jugadores llegan al torneo con apenas 17 años —la edad más baja entre los inscritos. Wallace Davi (Fluminense), Franco Mastantuono (River Plate), Koussay Maacha (Espérance de Tunis), Ibrahim Mbaye (PSG) y Areya Prasad (Auckland City) figuran entre las promesas.
Aunque probablemente tengan un rol limitado, representan una clara apuesta por el talento precoz.
En el otro extremo, la experiencia también tendrá lugar: Fábio (Fluminense, 44 años), Thiago Silva (Fluminense, 40) y Enzo Pérez (River Plate, 39) muestran que la longevidad deportiva aún tiene espacio, sobre todo en posiciones como portero o zaguero.
La Juventud Como Estrategia: Los Planteles Más Jóvenes del Mundial
El equipo con la menor edad promedio entre los clasificados es el Red Bull Salzburg, de Austria, con una media de apenas 22 años.
Se trata de un proyecto basado en el desarrollo de talento joven y la revalorización en el mercado europeo.
Entre los grandes, Chelsea y PSG también destacan por su juventud, con promedios de 23 años. Si bien la juventud aporta energía y dinamismo, también puede estar asociada a errores por falta de madurez.
En distintas ligas se ha observado que los jugadores jóvenes son más propensos a cometer infracciones que derivan en tarjetas.
En el extremo opuesto, River Plate, Atlético de Madrid e Inter de Milán apuestan por la experiencia: sus planteles tienen una media de 29 años.
En el caso del equipo argentino, referentes como Pérez y Armani aportan jerarquía y equilibrio, cualidades claves en fases decisivas.
Un Mundial de Pasaportes Múltiples
La globalización también se refleja en los documentos. Cerca de 300 jugadores tienen doble nacionalidad, lo que representa a uno de cada tres participantes del torneo.
Aunque Brasil lidera en número total de jugadores, son Argentina e Italia quienes destacan como principales exportadores de talento.
Argentina encabeza la lista con 53 futbolistas que militan en clubes extranjeros, seguida muy de cerca por Italia, con 52.
Brasil, por su parte, cuenta con 142 jugadores en total, de los cuales 41 están inscritos en equipos internacionales.
Es una cifra alta en términos absolutos, aunque proporcionalmente menor, ya que cuatro clubes brasileños participarán del torneo.
Estos datos no solo ilustran el alcance global del fútbol brasileño, argentino e italiano, sino que también refuerzan la idea del Mundial como un espejo de las dinámicas migratorias que moldean al fútbol contemporáneo: un deporte donde la formación local y la proyección internacional van de la mano.
